Los primeros que defendieron el feminismo fueron hombres liberales

La palabra feminista, a partir de la palabra latina «femina» y el sufijo «isme», se empleó por primera vez hacia los enfermos de tuberculosis por Ferdinand-Valérie Fanneau de la Cour, que lo utilizó en su tesis, Du fèminisme et de l’infantilisme chez les tuberculeux (Del feminismo y el infantilismo en los tuberculosos). Ya que según su tesis estos tenían o adoptaban un aspecto más afeminado por dicha enfermedad, es decir se empleó de un modo social-médico y no político. Si bien es cierto que los primeros que hablaron de igualdad lo iniciarion con sus escritos De l’Égalité des hommes et des femmes en 1622, de Marie Le Jars de Gournay y De l’Egalité des deux sexes de François Poullain de La Barre en 1673. Tiempo más tarde, personajes como John Stuart Mill (liberal y padre del utilitarismo) y Nicolas de Condorcet (liberal girondino) serían los primeros en presentar formalmente dichas peticiones para otorgar los mismos derechos a las mujeres. Cuando por aquel entonces sí que había machismo de verdad, y a los hombres que defendían esos derechos de igualdad de las mujeres se les llamaba feministas de forma despectiva para insultarlos así como si fueran afeminados. El detonante ocurrió por la publicación de la obra Vindicación de los derechos de la mujer, de Mary Wollstonecraft en 1792.

 

La primera vez que se usó como término feminista para lo cual nos referimos hoy en día fue meses después en 1872, donde Alexandre Dumas hijo, escritor y dramaturgo, retomó el término, ahora con un sentido socio-político, como insulto hacia los hombres que defendían la igualdad de derechos para las mujeres. En sus panfletos Feminismo y El hombre–mujer para desprestigiar a los varones que apoyaban decididamente el movimiento de mujeres que demandaban el acceso a sus derechos ciudadanos.